Publicado el 01/07/2022
LA VALORACIÓN DE LAS SEÑALES EN LA MTC
La elección de una técnica aplicada tiene que basarse sobre el cuadro patológico del momento y la diferenciación de los síndromes y luego, modificar el tratamiento en función de la evolución de la sintomatología.
Los síntomas o molestias se manifiestan bajo síntomas reflejos del estado general de la persona y con una variedad de cuadros clínicos.
Para poder aplicar un método eficaz se debe establecer una introspección (diagnóstico preciso). Este se realiza tradicionalmente en dos etapas:
la primera consiste en recoger los signos clínicos mediante un examen profundo que se realiza principalmente en cuatro tiempos, la inspección, la audición y la olfatación, el interrogatorio y la palpación.
la segunda consiste en determinar que cuadro clínico clásico definen estos síntomas.
La diferenciación de síndromes no excluye el introspección tradicional que permite individualizar la sintomatología y enriquecer el resultado.
La clasificación de los síndromes más utilizada en la MTC interna está basada en los órganos.
La diferenciación de los síndromes se hace a partir de:
1-la etiología, con factores climáticos, los factores psíquicos, los factores alimentarios, el factor cansancio,
2-los síndromes Qi, sangre, humedad (Yan, yin, edema)
3-los síndromes orgánicos
LOS CUATRO METODOS DE INTROSPECCIÓN (DIAGNOSTICO EN MTC)
Son cuatro métodos diferentes para conocer una sintomatología. Cada uno de ellos tiene su propia función. En la práctica clínica, se deben combinar para poder conocer de manera general la situación energética. La toma del pulso y la observación de la lengua, constituyen la característica propia de la MTC, desempeñando un papel importante en la práctica clínica, pero no se debe exagerar su función.
Los cuatro métodos de introspección permiten calcular el estado de Qi y de la sangre, la situación patológica de los órganos y vísceras y el pronóstico.
La primera etapa del examen clínico consiste en utilizar la vista para observar el aspecto general de la persona, determinadas partes de su cuerpo y determinadas secreciones.
La mirada que se pone sobre la persona debe ir de lo más general a lo más específico.
El estado de ánimo es la denominación general de las actividades vitales del cuerpo. Se establece una relación estrecha entre el estado de ánimo y el estado físico.
El aspecto normal es la manifestación de una abundante sustancia basal en una persona sana
El aspecto patológico es la manifestación de perjuicio de la sustancia basal, agotamiento de Qi y estado de ánimo afectado.
El color normal es el color de una persona sana.
El color patológico se refiere al cambio de color facial en un proceso patológico.
El color facial brillante y radiante, indica un proceso patológico moderado.
El color facial apagado indica un proceso patológico grave. El color verdoso indica el síndrome de frio, alía y éxtasis.
Etc., etc.
Es todo un arte que debe ser estudiado a fondo y comprendido; una vez conseguido esto, es infalible.